ethnic minority, nature, people, Vietnam
Leave a comment

Sapa y sus campos de arroz en terrazas

Sapa es una pequeña ciudad en las montañas, muy al norte de Vietnam. En los años 90 se convirtió en destino turístico, y desde entonces ha ido creciendo y ganando fama entre los viajeros. La actividad preferida aquí es el trekking, ya que lo realmente interesante de Sapa son sus alrededores. Sobre todo sus valles, moldeados en forma de terrazas sembradas de arroz, y la gente de las diferentes etnias que en ellos habitan, con sus trajes tradiciones y su forma de vida.

 

Auf Deutsch lesen

Es muy fácil encontrar una guía para hacer un trekking y visitar los poblados. Las mismas mujeres de estos poblados, vestidas con los trajes tradicionales y normalmente con un cesto de ratán en la espalda, van a Sapa para ofrecer excursiones, de uno o varios días, a los turistas. También es posible quedarse a dormir en sus casas con sus familias (Homestay), lo cual puede llegar a ser una experiencia única.
Los trekkings con guía también se pueden contratar en los hoteles, o en agencias, como lo hicimos nosotros el primer día.

Terrazas de arroz, Sapa
Terrazas de arroz hasta donde alcanza la vista…

Terrazas de arroz, Sapa
… no obstante en esta época del año el arroz ya ha sido cosechado.

Trekkingtour entre poblados y terrazas de arroz

Descendimos por el valle a través de senderos entre los campos de arroz. Este trayecto estaba bastante concurrido de turistas, sobre todo al principio cuando salimos de Sapa. Poco a poco los grupos se fueron dispersando por los diferente caminos del valle. Durante este trekking pudimos disfrutar desde dentro del maravilloso paisaje con sus terrazas de arroz.
Pasando por Lao Cai, uno de los poblados de la etnia Hmong, en el que se puede ver como hacen las artesanías, llegamos a Ta Van, poblado de la etnia Dzay, donde pasaríamos la noche en un Homestay con el resto de nuestro grupo. Estos poblados son de los más cercanos a Sapa y esto influencia mucho en la cantidad de turistas, tiendas de souvenirs, y casas como la que estuvimos nosotros, preparadas para acoger a muchos huéspedes. Cuanto más se aleje uno de Sapa más auténtica será la experiencia, y más posibilidades hay de encontrar pueblos originales que no estén modificados para el turismo.

Trekking en Sapa
Nuestro grupo de trekking. Tonje und Ørjan también estaban con nosotros. 

Mujer Hmong, Sapa
Mujer Hmong vestida tradicionalmente. Excepto el pañuelo colorido en la cabeza que es característico de la etnia Dzay.

Mujer y niñas de la etnia Hmong, Sapa
Es muy común que mujeres o niñas te acompañen parte del trekking con la intención de venderte sus artesanías.  

El amanecer en el valle, Sapa
El amanecer desde el poblado donde hicimos Homestay.

Gansos, Ta Van, Sapa
Paseo matinal de gansos por la calle de Ta Van.

Búfalos, Sapa
Aquí los búfalos solo tienen permitido entrar a los campos cuando no están sembrados. 

Amanecer en Sapa

Con Mama Cho por caminos remotos

De vuelta en Sapa tras nuestro primer trekking nos encontramos en la calle con Mama Cho. Era simpática y ademas podíamos entender su inglés, principales motivos por los que decidimos hacer con ella la excursión que nos ofreció para el día siguiente, que nos llevaría hasta su pueblo Hau Thao, de la etnia Hmong. También venia otro turista inglés, pero aun así nos sentimos como en un tour privado. El camino era una senda que ascendía por una ladera hasta llegar a un collado donde cruzamos al otro lado de la montaña. Excepto unos campesinos que venían de trabajar y algunos niños que jugaban con pájaros, no nos cruzamos prácticamente con nadie en todo el camino. El tiempo era más bien soleado, pero con densos bancos de niebla intermitentes. Esto provocó que desde aquí arriba diera la sensación, por momentos, de estar en una planicie, pero que de vez en cuando se despejara y pudiéramos ver las partes más bajas del fondo del valle.
Esa noche no nos quedamos a dormir en casa de Mama Cho porque queríamos aprovechar el día siguiente para hacer una excursión en moto.

Con la guía Mama Cho, Sapa
Mama Cho nos habló orgullosa de su pueblo, siempre con una sonrisa. 

Cerdos, Sapa
Cerca de las casas los animales campan a sus anchas. 

Textiles coloreados con indigo, Sapa
Para dar color a los tejidos que fabrican a base de algodón y de cáñamo, utilizan las hojas del indigo. Éstas dan al tejido un color azul oscuro.

Trekking, Sapa
El valle aparecía y desaparecía detrás de la densa niebla. 

En búsqueda del pico Fansipan

Alquilamos una moto para conocer los alrededores un poco más alejados de Sapa, y nos dirigimos al norte, hacia el Tram Ton Pass, un paso de montaña desde el cual se tienen unas magnificas vistas del valle. Si hubiéramos tenido más suerte con el tiempo, desde allí arriba podríamos haber tenido también un buen panorama de la cordillera del Fansipan, la montaña más alta de Vietnam con 3.143 m de altura, pero unas nubes nos lo impidieron.
La región de Sapa suele tener abundante niebla, tanto en verano, cuando más llueve, como en el invierno, que es seco y frío, llegando incluso a nevar. Después de los primeros días, soleados y calurosos, el clima cambió, se nubló y empezó a aparecer la niebla. A nosotros nos alcanzó justo en el punto más alto de esta retorcida carretera, por suerte por la tarde, cuando ya estábamos de vuelta.

Cerca del Tram Ton Pass, Sapa

Tram Ton Pass, Sapa
Vista de la carretera desde el Tramp Ton Pass.

Tram Ton Pass, Sapa
Las laderas que nos rodeaban eran de un intenso e hipnótico color verde.

Tram Ton Pass, Sapa
Aquí paramos con las manos medio congeladas cuando nos alcanzó la niebla en el punto más alto de paso de montaña…

Chiringuito en Tram Ton Pass, Sapa

Sticky rice a la brasa, Sapa
… y nos sirvieron café caliente acompañado de sticky rice a la brasa que en ese momento nos supo a gloria. 

Coloridos trajes y sencillas formas de vida

Evidentemente también pasamos alguna día en la ciudad, pero Sapa en sí, tiene poco de especial. Por sus calles, entre los muchos hoteles y restaurantes, se pueden encontrar cantidad de tiendas con todo tipo de productos para trekking. La mayoría tienen básicamente los mismos productos, todo falsificaciones, pero muchas son de buena calidad.

En un día de lluvia aprovechamos para ver el Sapa Museum, un museo etnológico donde se puede tener una visión general muy clara de las diferentes etnias de los muchos poblados que habitan los alrededores de Sapa. Éstas se pueden juntar en cuatro grupos: Hmong, Dzao, Dzay y Tay. Cada una de estas tribus tienen su propio idioma, que pasa de generación en generación. Las mujeres de las diferentes tribus se pueden distinguir por sus características ropas tradicionales, y por el tipo de joyas que llevan. Todas estas tribus tienen en común una importante tradición tejedora y se fabrican ellas sus trajes tradicionales.
La gente de estas etnias viven de una manera muy sencilla, casi por completo de la agricultura y la ganadería, aunque poco a poco el turismo está pasando a formar parte de sus vidas. Sus casas son muy simples, están hechas de bambú y cocinan en el interior de ellas con un fuego abierto, sobre el suelo de tierra.
En el museo se expone la historia de estas tribus, sus tradiciones, y sus ancestrales formas de vida. El museo esta realmente mal iluminado y si no hubiera sido con la linterna, no hubiéramos podido ver bien las piezas expuestas o leer muchos de los carteles informativos. Aun así fue muy interesante el poder profundizar en la cultura y las costumbres de las tribus.

De todas maneras, mucho más interesante que ver las cosas en un museo, es verlas en directo en los pueblos, y tomar parte en las actividades del poblado por uno o dos días. Esta experiencia tan autentica no la hemos vivido realmente hasta que no hemos estado de vuelta en Laos…. esto os lo relataremos en la próxima entrada.

 

Artikel auf Deutsch

Sapa und seine Reisterrassen

Sapa ist eine kleine Stadt in den Bergen im Norden Vietnams. In den 90ern ist der Ort unter Touristen beliebt geworden und seitdem wächst er stetig, genauso wie sein Ruf bei den Reisenden. Nach Sapa kommt man hauptsächlich wegen der grandiosen Landschaft, zum Wandern durch die mit Reisterrassen ausgekleideten Täler und um die dort ansässigen ethnischen Gruppen kennen zu lernen, deren Lebensweise und Traditionen.

Es ist relativ einfach einen Guide für eine Trekkingtour zu finden, um die Umgebung und die Dörfer rund um Sapa zu besuchen. Viele Frauen aus den Dörfern – traditionell gekleidet und oft mit einem gewebten Korb auf dem Rücken – kommen morgens in die Stadt und bieten den Touristen ein- oder mehrtägige Trekkingtouren in ihre Dörfer an. Vereinbart man eine Tour mit Übernachtung, schläft man in der Regel in deren Haus zusammen mit der Familie (Homestay), was ein einzigartiges Erlebnis sein kann.
Diese Art von Wanderungen kann man auch direkt im Hotel buchen oder in einem der Reisebüros, so wie wir es gleich am ersten Tag handhabten.

Terrazas de arroz, Sapa
Reisterrassen, wo das Auge hinblickt…

Terrazas de arroz, Sapa
… zu dieser Jahreszeit, ist der Reis allerdings schon geerntet.

Trekkingtour durch Reisterrassen und Dörfer

Unsere erste Tour führte uns zwischen den Reisfeldern hinunter ins Tal. Den ersten Teil des Weges legten wir zusammen mit vielen anderen Trekking-Gruppen zurück, aber bald nahm jede Gruppe einen individuellen Weg und die Massen verteilten sich. Landschaftlich bietet diese Tour herrliche Ausblicke auf das Tal und die Reisfelder.

Über das Dorf Lao Cai, das von der ethnischen Gruppe der Hmong bewohnt wird und sehr viele Möglichkeiten bietet schöne Handarbeiten zu erwerben, erreichten wir unser Homestay in Ta Van, ein Dorf der Ethnie Dazy. Diese Dörfer in unmittelbarer Nähe von Sapa, sind stark vom Tourismus beeinflusst, es gibt jede Menge Souvenirshops und Homestays, die für viele Gäste ausgelegt sind, wie das in dem wir nächtigten. Je weiter man sich jedoch von Sapa entfernt, desto authentischer wird die Erfahrung und desto größer ist die Chance Dörfer zu entdecken, die sich nicht für den Tourismus verbiegen.

Trekking en Sapa
Unsere Wandergruppe. Wieder mit von der Partie: Tonje und Ørjan.

Mujer Hmong, Sapa
Hmong-Frau in Tracht. Das bunte Kopftuch ist allerdings Teil der traditionellen Kleidung der Dzay.

Mujer y niñas de la etnia Hmong, Sapa
Manchmal begleiten Frauen und Kinder die Wandergruppen, in der Hoffnung den Touristen ihre Handarbeiten zu verkaufen.

El amanecer en el valle, Sapa
Sonnenaufgang nach der Übernachtung im Homestay.

Gansos, Ta Van, Sapa
Morgens beim Gänsemarsch durch Ta Van.

Búfalos, Sapa
Nur nach der Ernte dürfen hier die behäbigen Büffel durch die Reisterrassen marschieren.

koriander-y-manta_Sapa_Stadel

Mit Mama Scho auf entlegenen Pfaden

Zurück nach unserer ersten Trekkingerfahrung sprach uns Mama Scho auf der Straße in Sapa an. Ihre liebenswürdige Art war uns auf Anhieb sympathisch, als sie uns auf eine Wanderung in ihr Dorf Hau Thao, der ethnischen Gruppe der Hmong, einlud und weil wir auch ihr Englisch gut verstanden, verabredeten wir uns mit ihr für den nächsten Tag. Mit uns kam noch ein Engländer, aber trotzdem war es eine sehr private Tour, die uns zunächst über schmale Pfade einen steilen Hang hinauf führte. Es ging über weiche Hügel weiter, vorbei an Höfen und auf abwechslungsreichen Wegen. Wir begegneten kaum jemanden, nur manchmal sah man Einheimische beim Arbeiten auf den Feldern oder spielende Kinder. Die Sonne wechselte sich an diesem Tag mit dichten Nebelfeldern ab, die sich vor unsere Sicht schoben, sodass man meinte in einer Ebene zu laufen. Sobald sie sich auflösten, war der Blick ins Tal wieder frei.
Die Nacht verbrachten wir nicht zu Hause bei Mama Scho, sondern in unserem Hostel in Sapa, weil wir den nächsten Tag für einen Ausflug mit dem Motorrad nutzen wollten.

Con la guía Mama Cho, Sapa
Mama Scho hatte immer ein Lächeln auf den Lippen und uns gerne von ihrem Leben erzählt.

Cerdos, Sapa
Neben glücklichen Schweinen sieht man auch häufig Büffel und Hühner herumlaufen.

Textiles coloreados con indigo, Sapa
Zum Färben der Hanf- und Baumwollstoffen werden sehr gerne die Blätter der Indigo-Pflanze verwendet. Sie färben den Stoff tief dunkelblau.

Trekking, Sapa
Das Tal verschwand im dichten Nebel.

 

Auf der Suche nach dem Fansipan

Mit dem Motorrad nahmen wir die Straße Richtung Norden zum Tram Ton Pass. Uns wurde die Strecke vor allem wegen der tollen Aussicht auf den Fansipan schmackhaft gemacht, dem höchsten Berg Vietnams mit 3.143 Metern.
In Sapa und in der Umgebung gibt es häufig Nebel, sowohl im Sommer, wenn es viel regnet, als auch im Winter, wenn es trocken und kalt ist und manchmal sogar schneit. Nach den ersten Tagen in Sapa, an denen wir mit Sonnenschein und angenehmen Temperaturen gesegnet waren, erlebten wir einen Wetterumschwung, dem wir leider zu verdanken hatten, den sagenumwobenen Berg Fansipan nicht zu Gesicht bekommen zu haben. Zum Glück zog der Nebel erst am späten Nachmittag auf, sodass wir trotzdem einige wunderschöne Blicke an diesem Tag genießen konnten.

koriander-y-manta_Sapa_TramTonPass03

Tram Ton Pass, Sapa
Blick vom Tramp Ton Pass auf die kurvenreiche Strecke ins Tal.

Tram Ton Pass, Sapa
Das Grün der umliegenden Hänge war von hypnotischer Intensität.

Tram Ton Pass, Sapa
Auf der Rückfahrt wurde der Nebel immer dichter. Mit eiskalten Händen hielten wir hier am höchsten Punkt des Passes an…

koriander-y-manta_Sapa_TramTonPass05

Sticky rice a la brasa, Sapa
… um uns mit heißem Kaffee und gegrilltem sticky rice zu stärken, der in diesem Moment einfach nur himmlisch schmeckte.

Bunte Trachten und fremde Lebensweisen

Natürlich nahmen wir uns auch Zeit Sapa selbst anzusehen, mussten uns allerdings eingestehen, dass die Stadt an sich nicht sehr sehenswert ist. Sie besteht hauptsächlich aus Hotels und Restaurants, sowie zig Sportgeschäften, die alle die gleichen, oft gut gemachten Fälschungen verkaufen, generell Produkte rund ums Thema Wandern.

An einem Regentag besuchten wir das Sapa Museum, ein ethnologisches Museum in dem man sich einen guten Überblick über die verschiedenen Bergvölker machen kann. Sie können in vier Hauptgruppen zusammengefasst werden: Hmong, Dzao, Dzay und Tay. Jeder Stamm hat seine eigene Sprache, die von Generation zu Generation weitergeben wird, seinen eigenen Schmuck und besonders die Frauen tragen eine charakteristische Tracht, anhand der man leicht erkennen kann, welcher ethnischen Gruppe sie angehören. Was alle Stämme gemein haben, ist ihre uralte Tradition der textilen Handwerkskunst und das Herstellen ihrer Trachten.
Im Museum kann man sich außerdem einen Eindruck über die Geschichte und die Lebensweise der Menschen verschaffen. Ihre Häuser sind einfache Bauten aus Holz und Bambus und die Küche besteht aus einem offenen Feuer auf dem Lehmboden im Inneren der Hütte. Sie leben fast ausschließlich von der Landwirtschaft und der Viehzucht, wobei der Tourismus natürlich auch eine Erwerbsquelle darstellt.
Abgesehen davon, dass die Beleuchtung im Museum miserabel war, sodass man manche Informationstafeln ohne Taschenlampe kaum lesen konnte, war es interessant sich mit der Kultur auseinander zu setzen.

Spannender ist es natürlich, sich das echte Leben im Dorf anzusehen und für einen oder zwei Tage Teil der Dorfgemeinde zu werden. Diesen wirklich authentischen Einblick in das Leben der Bergvölker haben wir allerdings erst zurück in Laos bekommen… und davon werden wir euch bald berichten.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *